Manuel Andrés

Ya no me encuentro preguntando sos mi amor, por fin no ahí nada que pretenda no saber. Entiendo que no ahí relación entre amar y envejecer. Ya no me encuentro preguntando como dar, por fin comparto por el miedo de perder, el milagro de tus caricias llegando el amanecer. Ya no me encuentro contestando un yo que se, por fin entiendo que en tus redes yo caí, ya no me encuentro preguntándome un por que, por fin entiendo de una vez el por que si. Por que te vi. Te deje entrar cerré la puerta y le elegí. Por que esos dos faroles pueden hacer que si estoy fane las pequeñas cosas se bañen de brillo de esa ternura que trasmitís cuando me miras, hoy puedo entender que te gusta el te, que odias el café, que no queres rosas. Que a pesar del vértigo no ahí altura que impida que me saque el difraz. Tirando a matar dándonos changüí puro razonar puro frenesí. Siempre fue así nuestra historia que funciones o no, este bien o mal vivirlo con vos para mí es la gloria. Sin escatimar sin darnos de mas sin acelerar sin tirar pa tras siempre fue así nuestro asunto le sobra de acá le falta de allá retocándolo pero siempre juntos. Ya no le temo a ese cagón que habita en mí y a esos ataques tontos de furia precoz, distingo el resultado y hoy elijo estar con vos. ya no me encuentro figurando el veraz por fin no debo mas de lo que va a venir, pago los precios de tenerte darte amor y ser feliz. Ya no me encuentro contestando un yo que se, por fin entiendo que en tus redes yo caí, ya no me encuentro preguntándome un por que, por fin entiendo de una vez el por que si. Por que te vi. Te deje entrar cerré la puerta y le elegí. Por que me es imposible de imaginar agonía más cruel más aterradora que mi canto tu danza alegándose uno arriba del tren y el otro en la estación. En los momentos que quiero escapar de mi propia piel vos sos mi doctora, con mi panza y tu pasa rozándose no ahí poeta que no haga una canción

Cuando sientas que estoy triste, cuando notes algo extraño en mi mirada y no puedas saber qué me pasa, cuando creas que yo sufro, porque hay cosas que no son como pensaba, cuando me veas mal por favor no me digas nada.Cuando veas que la vida me golpea mis mejores fantasías, esas cosas que siempre soñaba, cuando la melancolía no me deje darte un poco de esperanza, cuando no pueda hablar por favor no me digas nada.
Con tu amor no hay nada que le pueda hacer mejor al dolor de mi alma, con tu amor a veces no me sirven las palabras sólo necesito amor.

Abrazá a tu pibe que debe llorar por dentro, como vos. Y decile lo que ya intuyó: Gimnasia es así. Contale lo que no sabe pero siente: Gimnasia es indestructible. Comentale de otros malos tiempos, elegí esa historia que tenías guardada y largásela como hizo tu viejo, cuando tenías la edad de las desilusiones tempranas. Decile cómo nos levantamos porque la gente no se rindió ni se rendirá. Contale la verdad: no sabés el final de la historia, pero como ayer en ese estadio que no nos gusta, reventó la tribuna. Y decile que el domingo estaremos otra vez al pie del cañón. Y que lo entienda: vamos a pelear hasta el final. Que no se venga abajo: ésta fue una batalla ganada que se arruinó, pero la guerra es más importante. Abrazalo, se va a sentir mejor.

Manuel Andrés

domingo, 24 de mayo de 2009

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